¿Qué significa realmente saber de tecnología?

No estoy seguro de tener una respuesta para la pregunta que planteo en el título, pero me he planteado esta pregunta esta semana. Yo soy informático de profesión, quiero decir que esa es la carrera que estudié en la universidad, es a lo que me he didcado en más de 20 años, y ahora me planteo la pregunta.

Esta semana visité un centro de innovación en Irlanda y durante la primera mitad de la visita me sentí muy cómodo, me impresionó de hecho el dominio que tenían en referencia a las temáticas de las tecnologías disruptivas, un dominio muy interesante de términos como "fintech", "blockchain", "big data", y unos cuantos más que están definitivamente de moda. 

Tampoco voy a decir que están más adelantados que en otros lugares. Nada de eso, es un nivel similar de conversación y de confianza, y de hecho muy parecido el resultado cuando se aterrizan los proyectos, que son mis preguntas típicas e incómodas. Es fácil escuchar cuánto dinero se invierte, la enorme cantidad de mentores que participan, los eventos que se hacen, y mucho más por contar, que si os soy honesto me impresiona solo por la cantidad de actividad, pero no por el fondo.

¿Cuántos proyectos están vivos? ¿Cuántos proyectos han completado un exit?

Estas son las preguntas incómodas. Esta semana la respuesta después de casi ponerles contra la pared e insistir varias veces, 3 proyectos, de hecho los que menos dinero recibieron, por los que prácticamente nadie apostó, esos son los que están vivos.

Es ahora cuando me hago la pregunta ¿Qué es realmente saber de tecnología? Porque mis interlocutores hablan muy bien de tecnología, y son quienes eligen proyectos y "embarcan" inversores, pero saber si algo se puede construir, si cuando se dice blockchain realmente se refiere a esto... eso me parece que no.

Tengo la impresión de que los abogados y los médicos se enfrentan a situaciones similares con frecuencia. Es muy normal escuchar a los afectados por una situación legal protestar porque las leyes no obedecen a una situación de sentido común, y por otro lado asombrarse (me ha ocurrido) cuando algo que parece imperativo en la práctica no lo es. Porque la práctica, la teoría y las definiciones son cosas separadas.

Para mí se sabe de coches cuando puedes conducirlos, y desarmarlos, y armarlos, y personalizarlos. Por ejemplo yo solo se conducirlos, por lo que no me puedo ubicar en la categoría de los que saben de coches. Si no has programado creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has monitorizado una red creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has importado y exportado usarios en una red creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has trabajado gestionando incidencias creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has recuperado datos corporativos desde una copia de seguridad creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has hecho un modelo de capacidad para una base de datos creo honestamente que no sabes de tecnología, si no has tenido que decidir entre diferentes modelos de procesador para servidores creo honestamente que no sabes de tecnología...

Cuando enseñamos en programas como el Business IT a los líderes, me preocupo mucho por las aplicaciones reales, por supuesto por las definiciones, pero dar ejemplos, que se vea el código y si es posible que lo toquen y lo sientan, porque de lo contrario resulta muy difícil tomar decisiones acertadas.

El rol de las certificaciones

En 1994 aprobé mi primera certificación, fue en Alabama, y estaba relacionada con un sistema de información geográfico, era requisito indispensable aprobar el examen y los requisitos asociados a la certificación para poder trabajar. Después de aprobarlo, pasé dos años subido en un avión dando charlas, implantando proyectos, recuperando sistemas, e incluso escribiendo procedimientos. 

La certificación es una herramienta que los mismos tecnólogos usamos para hacer discriminación positiva entre nosotros mismos. Es una forma de auto-regulación. Esta fórmula incluso funciona de maravilla para tecnólogos que no necesariamente fueron a la facultad, pero que poseen las habilidades, son bienvenidos a la profesión y a la práctica, sin importar de qué sectores vienen, solo se les pide un esfuerzo adicional, antes de impartir clases y dar ponencias, por favor "toque" la tecnología, cree algo, y si es posible, por qué no, certificarse.

Marlon Molina Colaborador experto en educación, formación, gestión de servicios TI y Gestión de Proyectos. Certificado ITIL, PRINCE2, ISO/IEC20000, SAM, y otros. Actualmente es el director de Computerworld University y de la Cátedra UDIMA-IDG para la Transformación Digital. Madrid, España.